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¿Quieres saber qué dice la psicología sobre cuál es la mejor manera de superar la ansiedad y aprender a aplicarla en 3 pasos?

 

Además, no estoy hablando solo de superar la ansiedad puntual. Es decir, esto no es solo una herramienta o truco más para afrontar un pico de ansiedad determinado que sucede en un momento concreto de tu vida. Sino que lo que aquí estamos tratando es una nueva forma de relacionarte con la ansiedad. Algo que  te valdrá para siempre, para todas las situaciones, y que te podrá ser útil para vivir con menos ansiedad, y sobre todo, te podrá ayudar a tener una vida más satisfactoria tanto en aquello que está directamente relacionado con la ansiedad, como con cualquier otra área de tu vida en la que una emoción te esté impidiendo hacer aquello que tú realmente quieres.

¡Vamos allá! Para presentarte la técnica te propongo un juego:

No pienses en un limón. Sobre todo, no pienses en su color, ni en la rugosidad de su piel ni en lo que sentirías si lo cogieras. Además, ni se te ocurra pensar en cómo sería su olor cuando lo cortaras en rodajas, y no pienses tampoco en  cómo sabría si mordieras la pula. No pienses en el sabor de su jugo ni en la sensación del líquido escurriéndose en tus dientes y en tu lengua, y tampoco en esa sensación como de escalofrío que recorre tu cuerpo al sentir el ácido.

¿Qué ha ocurrido? ¿Has conseguido no pensar en el limón?

La regla es:

No quieras tenerlo y lo tendrás.

Otro ejemplo: Pongamos por caso que te ponen una pistola apuntándote a la cabeza y te dicen, si no quieres que dispare, ordena tu habitación. ¿Lo harías? Probablemente sí.

Pero ¿qué pasaría en el caso de la ansiedad?

Imagina que te colocan en un polígrafo capaz de detectar cualquier reacción emocional por pequeña que sea. Hay una pistola apuntándote y te dicen: para que la pistola no dispare, lo único que tienes que hacer es no ponerte nervioso, o no sentir ansiedad. ¿Podrás hacerlo? Probablemente, en el momento en el que te dijeran eso, te pondrías todavía más nervioso y la pistola dispararía. ¿Cierto?

Otra vez, la regla es:

No quieras tenerlo y lo tendrás.

Visto que el “no querer tener ansiedad” no funciona, ¿qué podemos hacer? ¿Cuál es la alternativa efectiva?

Paso 1:

Asumir la naturaleza de la ansiedad 

Asume que la ansiedad es una respuesta normal del organismo, y como tal, una parte de la vida humana.

Paso 2:

Abrir la escala de estar dispuesto a sentir ansiedad

Hay una escala de ansiedad que va de 0 a 100. ¿Hasta qué numero en esta escala sería la cantidad máxima de ansiedad que te permites llegar? Es decir, intentas hacerla baja cuando llegas a ¿40? ¿ a 50? ¿a 60?

Bien, y sabiendo que, como en el caso de la pistola y el polígrafo, no querer tener ansiedad es igual a tenerla, te propongo otra escala:

La escala de estar dispuesto a que la ansiedad oscile como quiera.

¿Puede ser que hasta ahora estuvieras manteniendo a cero esta escala?

¿Qué pasaría si abrieras esta escala?

Paso 3:

Contempla la ansiedad tal como es

Cuando aparezca, contémplala. Pregúntate lo siguiente sobre la sensación de ansiedad:

-¿Cómo es?

-¿En qué zona de tu cuerpo la sientes con más intensidad? ¿En el pecho? ¿En el estómago?

-Si tuvieras que darle una forma, ¿cuál sería? ¿Redondeada? ¿Angulosa?

-¿Qué temperatura tendría? ¿Más bien fría o caliente?

Siguiendo estos pasos se consigue, como decíamos al principio, una nueva forma de relacionarse con la ansiedad, con la que se alcanza:

  • Que la ansiedad dure menos tiempo. Es decir, que su  permanencia, una vez ya haya aparecido, sea menor.
  • Que la ansiedad tenga menos intensidad. Contemplara es lo opuesto a alimentar la ansiedad y hacer que crezca. Porque recordemos la regla: No quieras tenerla y la tendrás.
  • Que la ansiedad aparezca con menos frecuencia. A medida que vayas practicando este ejercicio, la ansiedad tenderá a aparecer menos en tu vida.

Si os interesa una explicación técnica de los mecanismos psicológicos del porqué esto funciona, estaré encantado de que me lo hagáis saber para subirlo en un vídeo posterior.

Lo mismo si por lo contrario, os parece más oportuno un vídeo de meditación guiada o hipnosis para aprender a hacer el ejercicio propuesto en el paso 3 e integrar el aprendizaje de estos tres pasos.

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Gracias.